A pesar de que el balance de las empresas que participaron en Expoagro, relacionadas al rubro agropecuario, entusiasma, a pesar de que todavía falta mucho camino por recorrer en un año electoral, cruzado por demandas insatisfechas en relación a la reducción impositiva, la competitividad, y otras variables, como la sobrevaluación del peso con respecto al dólar, que siguen generando incertidumbre.
Hace algunos días, se conoció el primer relevamiento industrial del 2025 realizado por la Unión Industrial de Córdoba (UIC), que muestra un panorama complejo para la industria. Si bien hay señales de estabilidad macroeconómica, la clave sigue siendo la caída en la rentabilidad, a lo cual se suma retroceso en la demanda interna, con números negativos después de tantos meses, y la reducción de la producción. Todo esto es lo que marca el inicio de un año con desafíos para las empresas industriales.
Según el informe, el 48% de las industrias perdió rentabilidad en lo que va del año, una tendencia que responde al aumento de costos y a la contracción del mercado local.
En este contexto, el 41% de las empresas redujo su nivel de producción respecto al trimestre anterior, mientras que solo un 22% logró incrementarlo. Sin embargo, a pesar de este escenario, un 71% de las empresas mantiene expectativas optimistas para el año.
A nivel de inversiones, el relevamiento muestra que el 53% de las empresas mantuvo su nivel de inversión, mientras que el 24% lo incrementó y un 23% lo redujo. El empleo, por su parte, se ha mantenido relativamente estable, con un 68% de las compañías sin cambios en sus nóminas de trabajadores.
El informe también resalta que la industria ha logrado mejorar su cadena de pagos. La mayoría
de las industrias pudo cumplir con sus compromisos financieros, salarios y proveedores.

Aunque las microempresas registraron problemas en el pago de salarios y otros compromisos que derivaron incluso en reducir turnos y personal, mientras que las pequeñas y medianas, si bien tuvieron baja de la demanda y producción, pudieron mantener el nivel de inversión, reconociendo que lo más preocupante para ellas tiene que ver con afrontar el pago de tarifas que aumentan prácticamente mensualmente, y de impuestos, que, además de que no se redujeron en ninguna medida,
sigue resultando muy pesada la carga impositiva que innegablemente quita competitivi-
dad, pero también rentabilidad.
Las más perjudicadas sin dudas son las empresas más pequeñas, a las cuales se les hace más cuesta arriba, no así las grandes industrias que lograron seguir manteniendo los niveles de producción, y tienen muy buenas expectativas de poder consolidar el crecimiento en los próximos meses, es decir el 2025
arrancó con mucho optimismo.
El informe concluye que la estabilidad económica será un factor determinante para que las empresas puedan recuperar sus niveles de producción y rentabilidad. Mientras tanto, la apuesta a la inversión en innovación y tecnología se mantiene como una estrategia central para el crecimiento del sector.
Si bien, el informe corresponde a la Unión Industrial de Córdoba, muchos de estos aspectos comentados, los podríamos trasladar al sector comercial, donde también las expectativas son positivas, pero ciertamente con mayor urgencia necesitan la corrección de la parte impositiva, porque entienden que de otra manera esta actividad, como cualquier otra se tornará inviable.
Es por este motivo, que las federaciones, como el caso de FEDECOM, insisten en la necesidad de avanzar en la reforma impositiva, para lo cual de la mano se requiere hacerlo también con una reforma laboral, sin estas dos cuestiones sin resolver en el mediano plazo, y con la apertura de la economía y baja de arance-
les a productos importados, en curso, el panorama podría ser más complejo de lo esperado.
