Diego Ferrari aplica la tecnología de los drones a la producción a agropecuaria en su empresa DRONAP, cuya empresa está ubicada en calle Ricardo Gutiérrez 340 y en redes sociales, iniciando un camino novedoso y que tiene muchas expectativas.
Explicó que hace dos años que viene vinculado al tema de drones agrícolas y la limitación en las importaciones que existía, hizo que todo se demorara un poco pero finalmente llegó el equipo y comenzó a desarrollar la actividad con el objetivo puesto en la parte comercial con la venta de drones agrícolas y sus accesorios, como también para prestar servicios y empezar con el trabajo en ese sentido.
Recordó que la aplicación de tecnología de drones a la producción es algo nuevo en el país: “Los primeros drones agrícolas llegaron hace cuatro o cinco años, de diez litros de capacidad, y ahí fue innovando mucho el mercado y hoy tenemos drones como el nuestro de 50 litros de capacidad de carga, 50 kg en sólido, que tiene una gran versatilidad, que permite pulverizar, sembrar, fertilizar, es muy variado el uso que se le puede dar, nuestra empresa se va a enfocar principalmente en la comercialización y prestar servicios en la zona de Las Varillas”, expresó en conversación con EL HERALDO.
Detalló que el dron tiene numerosas ventajas ya que viene a complementar la pulverización que se hace en forma tradicional con mosquito y pulverizadora autopropulsada, “y en otros sectores viene a cubrir nichos que hoy se complicaba poder trabajar, este tipo de drones nacieron en China en la producción de arroz, por una cuestión de que no tenían que pisar, así surgió esta tecnología y fue evolucionando, en nuestro país el uso de drones es diverso, desde agricultura de cultivo extensivo, hortícola, frutales, viñedo, hemos tenido consultas para hacer tantos tipos de aplicaciones, que todavía estamos encontrando nichos nuevos para poder trabajar. Por ahí el producto hoy asocia el dron con un equipo que es más para la huerta, porque los primeros drones hacían 3 o 4 hectáreas por hora, tenían poca capacidad operativa, pero con los nuevos drones como el que tenemos nosotros, y por pruebas que hemos hecho, hemos llegado a hacer hasta 30 hectáreas por hora, lo que nos da en un día de trabajo alrededor de 250 hectáreas, que se asemeja mucho a lo que hace una máquina autopropulsada, esa es una de las ventajas con la cual se lo empieza a mirar con otros ojos…”, se explayó Diego.
“Hoy cualquiera que tenga conocimiento de operar un celular, puede operar un dron”
Asimismo, aseguró que otra delas ventajas es que es mucho más barato de lo que hay en el mercado para pulverizar, y al mismo tiempo tiene ventajas desde lo ambiental, ya que no tiene emisión de carbono, en lo productivo no se pisa más el lote, se disminuye el riesgo de error humano “porque nosotros le marcamos el límite de donde va a trabajar, le damos ciertos parámetros, y es totalmente automatizado, va a hacer todo solo, con la llegada de la inteligencia artificial el mismo dron detecta, tiene sus radares, para prevenir cualquier tipo de siniestros, hoy cualquiera que tenga conocimiento de operar un celular, puede operar un dron, la complejidad pasa por la calidad de aplicación o la parte agronómica, ahí ya hay que estar con gente que conozca del tema, cambia mucho la forma de trabajar, tradicionalmente hoy una pulverizadora está tirando 100-120-150 litros de agua por hectárea, y con el dron hacemos aplicaciones a 7-8 litros por hectárea, es decir son muchas las ventajas que trae”, dijo.
Señaló que sucede es que es algo nuevo y no se conoce, y por eso tenemos entiende que todavía falta trabajar fuertemente en muchas cuestiones, desde la parte de habilitación y regulaciones con la ANAC, también con el Ministerio de Agricultura, debido a que en la actualidad no hay una legislación clara que permita o prohíba el uso de drones, aunque reconoce que hay algunos avances al respecto.
“El 2025 será un año muy bueno de la adaptación de los drones al sistema agropecuario”

Por otro lado, Diego destacó que en las muestras que llevan a cabo para productores agropecuarios, nunca había visto que un producto nuevo como el dron generara tanto interés. “Se ha acercado muchísima gente consultando, con los miedos lógicos todavía, porque en internet vemos videos de drones que se caen, aunque esos son todos accidentes generados por el propio ser humano, ya que el dron tiene todas las medidas de seguridad para que solo no sufra accidentes, la repercusión que hemos tenido es muy buena, es cuestión de tiempo para que esto se vaya masificando, con todas las ventajas que el equipo tiene. Nosotros estamos haciendo cursos, nos estamos capacitando, y se cree que el 2025 va a ser el boom de ventas, el año pasado en Argentina se vendieron alrededor de 300 drones agrícolas contra el mercado brasilero que vendió 12 mil, esto porque la tecnología demoró en ingresar al país, hoy ya está disponible, el productor la está conociendo, le está perdiendo el miedo, sobre todo el productor de mediana edad, en nuestro país el promedio de edad de los productores está en los 45 años, a diferencia de EEUU que está arriba de los 60, quiere decir que tenemos muchos más jóvenes y más amigados con la tecnología, que la entienden y ven de otra manera, por eso creemos que el 2025 será un año muy bueno de la adaptación de los drones al sistema agropecuario argentino…”, sostuvo.
Por último, opinó que con el tiempo el dron irá aumentando su capacidad y tiempo de vuelo, lo que permitiría hacer más hectáreas por día, “lo que con el tiempo va a ir reemplazando a lo tradicional, hoy en muchos lugares complementa lo que hay en el campo para trabajar y en otros directamente ya lo reemplaza, por eso creo que es cuestión de tiempo y se va a ir imponiendo cada vez más…”.







