El Licenciado en Economía Carlos Seggiaro dialogó con EL HERALDO-diariodelasvarillas, sobre el consumo, indicando que si bien últimas cifras muestran que hay una leve recuperación, las estadísticas se deben mirar en base a qué punto de referencia están realizadas, ya que se compara el consumo del primer trimestre de este año con respecto al mismo período del año pasado, «donde enero, febrero, marzo hubo una caída brutal del consumo, donde se derrumbó un 20-30 por ciento, las medidas tomadas en el inicio de Javier Milei generaron un golpe muy fuerte en algunos segmentos como jubilados, empleados públicos, monotributistas, etc.».
Por lo tanto entiende que efectivamente se produjo una recuperación pero comparada con el peor momento del año pasado «da datos estadísticos que son más alentadores de lo que realmente tiene la sensación la gente, un dato como por ejemplo de la Cámara de los Panaderos de Córdoba que decía que el consumo de pan cayó con respecto al año pasado un 10 por ciento, de criollos un 20 por ciento, a medida que te vas a cosas de más calidad va cayendo más, siendo el peor desempeño en los últimos veinte años. Si uno habla con un panadero de Las Varillas, posiblemente te va a decir que no tiene esa sensación porque el nivel promedio de ingresos allí es superior al de cualquier barrio de la ciudad de Córdoba, es decir que también es cierto que hay que tener alguna cautela de no generalizar demasiado algunos comportamientos, en la medida que nos vamos a ciudades más grandes, nos encontramos que tienen más presencia los sectores de menos poder adquisitivo, que han sido más golpeados en este proceso», detalló.
Explicitó que los datos interesantes es como cambió la composición de los insumos, debilitándose el consumo de carne vacuna, lácteos, y como contraparte aumentó el consumo de arroz, fideos, de huevos que es la proteína más barata que está en el mercado. «La foto la conocemos casi todos, cuál es la película, y tengo la impresión de que los sectores que han perdido poder adquisitivo en los últimos tiempos van a tener muchas dificultades para poder recuperar ese poder adquisitivo, no sólo en lo que resta de este año, si no también mirando al año próximo», dijo.
Precisó que el poder adquisitivo de millones de personas en nuestro país no empezó a caerse cuando asumió Javier Milei, sino que viene deteriorando desde 2012 de manera ininterrumpida, por lo tanto cuando a inicios de 2024 se produce el salto hacia abajo de la caída de poder adquisitivo de millones de personas, «se produce de un punto que ya era malo, esa caída adicional ha sido muy dura para amplios segmentos sociales y desgraciadamente la recuperación no va a tener las condiciones que nos gustaría pensar desde el punto de vista social».

Por otro lado, manifestó que del otro lado del mostrador, las empresas están afrontados una caída de márgenes de rentabilidad, por lo tanto están ajustando costos, para poder seguir avanzando con esa caída del margen de rentabilidad. «Pensemos en los productos de consumo masivo cómo las empresas han salido a hacer promoción, ofertas, el 2×1, en definitiva es una baja de precios camuflada, y en general los consumidores se ha vuelto más racional, selectivo, más cuidadoso con el gasto», expresó.
Añadió que el modelo económico que está comenzando en nuestro país, apunta a una caída de los márgenes de rentabilidad en todos los sectores: «Está cayendo el margen de rentabilidad del sector agropecuario, del sector industrial y por supuesto en el sector comercial y de servicios, si estuviera el Presidente escuchándonos, diría que es un sinceramiento, porque hay márgenes excesivamente altos, lo cual es una manera de verlo también, cada quien lo mira desde su lugar, pero lo cierto es que es la contracara de lo anterior, esa caída del poder adquisitivo obliga a las empresas a cambiar de actitud, tener comportamientos diferentes que apuntan a no perder más clientes de los que ya perdieron».
En cuanto al empleo, afirmó que por ahora las estadísticas no muestran índices preocupantes, aunque cree que el ajuste que están comenzando a hacer muchos sectores empresarios, inevitablemente va a conducir a un aumento de la tasa de desocupación, lo cual no solamente tiene que ver con el funcionamiento de la economía interna, sino también con el proceso de apertura económica.

«Cuando estamos diciendo que se está habilitando la importación de maquinaria agrícola usada de EEUU que vale hasta cinco veces menos que la maquinaria en argentina, «esto inevitablemente va a generar un problema en los sectores de maquinaria agrícola del país, y va a generar algún ajuste. Cuando uno lo mira como consumidor se pone contento, va a bajar el precio de los celulares, los televisores, la maquinaria agrícola, pero como contracara vamos a ver un ajuste en amplios segmentos industriales de argentina que va a tener una cuota obviamente de expulsión de mano de obra», se explayó.