Nanci Magnien cumple 25 años como cosmetóloga, llevando adelante su propio emprendimiento con Ninfas Estética, aunque en el mundo del maquillaje ingresó varios años antes.
Realizó su carrera profesional en San Francisco, la cual consta de dos partes, por un lado, lo referido a facial y maquillaje, y la segunda parte en maquillajes, que reconoce hizo con cortes por circunstancias de la vida, pero pudo concluirlas y mientras tanto trabajar.
El mundo dela belleza es algo que siempre le gustó mucho, y sus comienzos fueron con la venta de productos Mary Kay, era la maquilladora porque se dedicaba específicamente a eso, y es así que pudo maquillar a muchísimas mujeres de Las Varillas para diferentes fiestas, y ahí es cuando fue observando la necesidad de mejorar la piel, y eso la llevó a estudiar estética facial.
Comentó que todo se fue dando naturalmente hasta que llegó a tener su propio local “surgiendo a raíz de una idea, un comentario, que se juntó con una situación dolorosa en lo personal, de la cual necesitaba salir, y me decido a empezar a estudiar…”. Cuando fue a la primera clase, recuerda que le fascinó, y no dejó nunca de asistir, de estudiar, y aprender.
Desde sus comienzos hasta la actualidad, cree que han pasado entre 8 y 10 mil personas por Ninfas, que se inició en su casa en primera instancia con una camilla y muebles “caseros” que le ayudaron a hacer sus familiares, y en esa primera etapa la gente pedía mucho la depilación, luego fue el boom de los corporales, “y a mí me gustaba el facial, y me costó tiempo incorporar la necesidad del cuidado dela piel, que es tan importante, siempre apunté a eso, después trabajaba tanto que necesité personal extra, sentí que era demasiada invasión para mi familia, por eso surgió la idea de irme a un local en el centro, y así es que se compró una casa exclusivamente para eso, cuando entré, dije este es mi lugar…”, expresó.
Nanci siguió capacitándose a lo largo de los años, y por ello estudió todo lo que existe en estética: pestañas, uñas esculpidas, masajes, aunque se dedica más a lo facial porque es lo que más le gusta y es lo que más rápido se ve en resultados, pero también hace corporales, masajes de relajación, y cuando le piden manicuría, etc.
Al hacer un balance de todos estos años dedicada a la estética, afirmó que la salvó de muchísimas cosas, “primero de una situación dolorosa que tenía que transcurrir, después me ayudó a conocer personalidades como Mirta Legrand, Pancho Ibañez, a todas las mujeres que hacían Utilísima, porque me iba a todos los Congresos de Buenos Aires y de Córdoba, me trajo muchísimas satisfacciones, hacía fiestas todos los años con mis clientas, donde sorteaba productos, llevaba a Cristian Reynoso, y además me sirvió como medio de vida, como un sustento económico, la verdad que no puedo pedir más de lo que me ha dado esta profesión”.
“No hay mujeres pobres ni feas, hay mujeres que no se están arreglando”
En la actualidad, decidió reflotar su academia, por lo tanto, comenzó con cursos desde abril, utilizando el espacio del CeCIP, con descuentos para socios de dicha institución, y la parte práctica que desarrollará en su gabinete, con certificación oficial, en total son seis meses intensivos.
Para Nanci la premisa es “no rendirse nunca, uno tiene que tener proyectos, sueños, siempre es complicado, no todo llega tan simple, y no hay mujeres pobres ni feas, sólo hay mujeres que no se cuidan, que no se están arreglando, mujeres que no están encontrando el lugar específico para ponerse bellas”.
