Con una nueva convocatoria récord de alumnos en esta temporada, la escuela municipal de verano concretó el cierre de clases con el tradicional campamento, en las instalaciones del Aeroclub.
Participaron más de doscientos cincuenta alumnos de entre seis y doce años.
Entre las actividades más sobresalientes, la más atractiva fue el fogón que acompañó el acantonamiento en el predio, que presenta un espacio de diálogo y escucha para que los niños puedan manifestarse y compartir.






