En la tarde del lunes, y en función de la observación de videos, se identificó a quien arrojó el ladrillo que le causó un fuerte golpe en la cabeza al policía Julio Ribotta.
El detenido es un hombre de 34 años, quien está acusado de LESIONES GRAVES DOBLEMENTE CALIFICADAS POR SER MIEMBRO DE FUERZAS POLICIALES Y EN OCASIÓN DE ESPECTÁCULO DEPORTIVO.
En tanto, el policía se encuentra fuera de peligro, la última tomografía no muestra cambios, recordando que llegó al Hospital Iturraspe con fractura de órbita, frontal y celdillas etmoidales y un pequeño hematoma cerebral.
Cómo se iniciaron los incidentes
Según trascendió, el inconveniente se inició cuando desde la hinchada de Laspiur le gritaron durante el partido al arquero de Huracán (Elías Salamanca), quien hace poco tiempo perdió en un accidente a su madre y anteriormente a un hermano, epítetos como: «Ojalá se te muera el resto de la familia».
Una vez terminado el partido, el jugador se acercó a quienes le gritaban a reclamar por las palabras «hirientes», y comenzó la discusión, donde intervinieron otros jugadores tratando de calmar los ánimos, y posteriormente rápidamente se terminó desmadrando todo con la intervención de ambas hinchadas, mientras que los dirigentes de ambos clubes (Huracán y Unión D. Laspiur), junto a los efectivos policiales que había en el lugar intentaban separar y dispersar para terminar los disturbios.
Por su parte, desde la hinchada de Unión Deportiva de Laspiur señalan que en realidad no le dijeron lo mencionado arriba al arquero de Huracán, haciendo alusión a la pérdida de sus familiares, sino que fue un insulto de menor tenor y común en las canchas, siendo además que posiblemente los hinchas de Laspiur no tendrían conocimiento de la situación personal del arquero.