ESTADOS UNIDOS INTENSIFICA OPERATIVOS EN EL CARIBE
El presidente Donald Trump anunció que las fuerzas estadounidenses hundieron un tercer barco frente a las costas de Venezuela y exigió a Nicolás Maduro que cese el envío de drogas a Estados Unidos. La declaración, realizada desde la Casa Blanca antes de una visita al Reino Unido, intensifica las tensiones entre ambos países en el marco de operativos antidrogas en el Caribe.
Detalles del operativo y advertencia de Trump
Donald Trump corrigió un anuncio previo al confirmar que las fuerzas navales de Estados Unidos interceptaron tres barcos venezolanos, no dos como se informó inicialmente. Según el mandatario, uno de los navíos se hundió, pasando desapercibido. Aunque no se precisaron la fecha ni el lugar exacto del tercer ataque, Trump advirtió directamente a Maduro: “Deje de enviar drogas a Estados Unidos”.
El lunes, Trump había revelado un operativo en el Caribe que resultó en la muerte de tres personas, calificadas como “terroristas”, sin bajas estadounidenses. En respuesta, Maduro denunció una supuesta “agresión militar” de Estados Unidos y afirmó que su país ejercerá su “derecho legítimo a defenderse”. El líder venezolano rechazó las acusaciones, argumentando que el tráfico de cocaína hacia Estados Unidos se realiza principalmente por el Pacífico y puertos de Ecuador.
Reacciones desde Venezuela
El ministro venezolano Diosdado Cabello calificó el operativo como una “agresión ilegal” y acusó a Estados Unidos de actuar “como piratas” al abordar un barco para “sembrar drogas a pescadores”. Estas declaraciones refuerzan la postura de Caracas, que ordenó el despliegue de 25.000 militares en zonas fronterizas y llamó a la Milicia Bolivariana a prepararse ante una posible invasión.
Este es el tercer incidente reportado desde que Estados Unidos desplegó una flota naval en el Caribe para combatir el narcotráfico. El primero ocurrió el 2 de septiembre, cuando una lancha rápida fue hundida, dejando 11 tripulantes muertos.
Contexto de las acusaciones
La Casa Blanca señala a Maduro como líder del Cartel de los Soles y mantiene una recompensa de 50 millones de dólares por su captura. Este nuevo episodio agudiza el conflicto diplomático, mientras Venezuela refuerza su postura defensiva frente a lo que considera una amenaza directa de Estados Unidos.
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