Actualmente cuentan con los tres primeros años y hay mucho interés en el programa que ofrece donde los estudiantes salen con el título de Bachiller en Desarrollo de Software.
La directora de la escuela PROA de nuestra ciudad, Elsa Cavagniac, dialogó con EL HERALDO sobre el desarrollo de las actividades escolares, que hasta que se inaugure el edificio se realizan en la escuela primaria Bartolomé Mitre, que gentilmente comparte parte de su espacio.
Según indicó a EL HERALDO, los responsables de la construcción del imponente edificio que se encuentra en el sur de la ciudad, frente al Periférico II, tienen la indicación de que esté finalizado a fines de este año, para comenzar con el ciclo lectivo 2022 en las nuevas instalaciones, que generan muchas expectativas.
La directora destacó la predisposición del cuerpo directivo y docente de la escuela Mitre, que año a año les fueron facilitando un aula más y adaptando los espacios con ciertas limitaciones más aún por razones de la pandemia y las medidas sanitarias a cumplir, lo que implica que los estudiantes no se deben cruzar con la primaria en los lugares comunes.
Desde agosto pasado están volviendo a la normalidad con clases plenas y cumpliendo los protocolos, lo que tiene disposiciones como por ejemplo que no permite el ingreso para brindar Talleres o que los estudiantes no pueden salir para determinadas actividades. Mientras que el año pasado fue íntegramente virtual que hizo que algunos alumnos no pudieran mantener ese ritmo y al terminar el año se dividieron en aquellos que alcanzaron los aprendizajes satisfactoriamente, otros que les costó pero sortearon la situación, y otros pocos reiniciaron el año que no pudieron hacer.
Recordó que la PROA implementa un plan de estudio que es un programa avanzado que tiene los mismos espacios curriculares que el resto de las escuelas secundarias, pero desde el primer año tiene seis materias más, tres de ellas son específicas de la programación, y las otras tres tienen que ver con del desarrollo integral que son Educación Física, Educación Artística y doble jornada de Inglés, todo apuntando a la programación.
“Desde el primer año se nos fue equipando de a poco con recursos tecnológicos, tenemos en cada aula un televisor para que los profesores conecten su computadora y puedan utilizar recursos como presentaciones, videos, etc.. y hemos recibido por parte del Ministerio de Educación un kit de 22 notebook que se van utilizando en diferentes momentos, también hicimos campañas y logramos reunir cinco dispositivos portátiles más para las actividades pedagógicas. Los docentes en su planificación siempre apuntan a la inclusión de la tecnología en todos sus espacios curriculares, trabajando de manera transversal con los espacios específicos de la programación…”, se explayó Elsa Cavagniac.
Asimismo, precisó que un espacio propio del PROA es el Club de Ciencias, que abordar puntualmente la robótica, todo lo curricular apuntan a la integración y articulación con la programación y robótica. “Con fondos que se obtuvieron de cooperadora se armaron robot para trabajar con programación arduino, de manera que cuentan con un pequeño robot al cual le programan las instrucciones para hacerlo funcionar, es parte del aprendizaje”, añadió la directora.
Actualmente cuentan con 63 alumnos entre primero, segundo y tercer año, con muchos interesados ante la próxima apertura de las inscripciones, que serán desde el 15 de noviembre y por el CIDI, superado el cupo el mismo sistema hace un sorteo. El título con el cual salen los estudiantes es Bachiller en Desarrollo de Software.
Elsa subrayó que cada año son más los interesados pero recomendó a los padres que se inscriban los alumnos que realmente tienen interés en desarrollo de software debido a que este tipo de educación requiere el acompañamiento y el compromiso de las familias, porque cuando llegan a sus casas tienen que estudiar y hacer tareas.
Además porque la jornada escolar es también distinta, contempla un ingreso a las 8,00 y salida a las 16,00, donde reciben desayuno, almuerzo y merienda, por la pandemia esto se pudo cumplir sólo en 2019, actualmente se ve reducida por los protocolos, por ende no llegan hasta las 16,00 con la idea de que no permanezcan tanto dentro dela escuela, pero completan algunas de las actividades de manera virtual.
Muchas expectativas por el edificio propio
La docente destacó que las expectativas por el edificio de la escuela PROA son muy buenas a nivel general ya que se observa un gran avance de la obra y es muy grande. Cuenta con cuatro aulas amplias, y contará con todo el equipamiento necesario en los gabinetes de laboratorio y de informática.
La información que tienen es que debería estar finalizada a fin de año e iniciar las clases en 2022.
